NO LOGO DE
NAOMI KLEIN.
EL PODER DE
LAS MARCAS.
La principal preocupación de
todos los fabricantes serios era fabricar artículos.
La función básica e
irreversible de la economía de una industria es la fabricación de la cosas,
claro que mientras más se fabrique más ingresos habrán, durante mucho tiempo la
fabricación de artículos siguió siendo la principal economía industrial, la
producción de bienes solo es un aspecto secundario de sus operaciones, y que
gracias a las recientes victorias logradas en la liberación del comercio y las
reformas neoliberales, el éxito lanzo a las empresas a una carrera hacia la
ingravidez: la que menos cosas poseen, la que tiene menor lista de empleados y
produce las imágenes más potentes, y no productos, es la que gana.
La fabricación de productos
puede exigir máquinas, hornos, martillos y cosas semejantes, para crear marcas
es necesario un conjunto de instrumentos y materiales completamente diferente.
Consideremos la marca como
el significado esencial de la gran empresa moderna, y la publicidad como un
vehículo que se utiliza para transmitir al mundo ese significado.
Las primeras campañas
masivas de publicidad, se relacionaban mas con la publicidad que con la marcas
tal como las entendemos hoy.
Los primeros productos
basados en las marcas aparecieron gracias a la innovación relativamente
reciente: las fábricas.
En la era de las máquinas la
competencia por medio de las marcas llego a ser una necesidad: en un contexto
era necesario fabricar tanto los productos como su diferencia según la marca.
Las empresas pueden fabricar productos, pero los consumidores compran marcas.
En conclusión las marcas son
de mucha influencia en la actualidad, ya que nos vemos incluidos en el consumo,
muchas veces adquirimos ropa de marca ya sean productos como: topers, zapatos,
bolsos, chamarras, perfumes etc., a veces hacemos la acción de comprar por
darle gusto a las personas no por que queramos lucir tal producto caro.
Como ya se dijo las fábricas
tienen la capacidad de hacer productos y con objetivo de que atraiga a la sociedad
y esta se vean relacionadas con el consumo.
Hay que lucir algo que te
guste y no dejarte llevar por lo que la sociedad diga de tu persona y tus
gustos.